La programación Neuro Lingüística tiene maravillosas ventajas si sabemos emplearle: nos ayuda a visualizar la vida de una manera más positiva, a afrontar los retos con mayor decisión, a focalizar nuestra mente en un objetivo, en fin… ¡Son muchos los beneficios que puede aportarnos! Pero como la mayoría de cosas en nuestra vida, la PNL necesita de apoyo, perseverancia, aprendizaje y crecimiento.
Hemos hablado sobre la PNL y las formas básicas bajo las cuales podemos realizar una programación sencilla para con nosotr@s mism@s, y dijimos que es preferible realizar una programación exitosa que mil infructíferas. Además, que debemos ser muy responsables y una vez programad@s no debemos ir a cada instante a ver si la semilla que sembramos ayer ya creció en nuestra mente.
¡La PNL necesita de perseverar!
Tú me dirás: “¿Cómo? Primero me dices que no vaya todos los días a revisar si lo que programé se cumplió y ahora me dices que persevere?” A lo que te respondo, este no es un proceso a blanco y negro y necesitamos de un par de grises en nuestro consciente, para lo cual, necesitamos perseverar.
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| Subconsciente y consciente unidos, ¡Maravilloso sería! |
La PNL necesita de nuestro consciente.
Bien has de saber que la programación neuro lingüística se crea en un estado del subconsciente, lo cual resulta muy efectivo y poderoso; empero, sería doblemente productivo que esas programaciones sean apoyadas por nuestra mente consciente y nuestros pensamientos diarios. Te explico: lograste programarte para dejar de fumar, pero todo el tiempo mientras tus ojos están abiertos –y hasta en sueños- dices que no podrás y te pones mil limitaciones… Él árbol de la programación que realizaste para dejar de fumar es fuerte y resiste los sacudones, sin embargo, no puedes pedirle que termine ileso, ya que todo el tiempo intentas dañar sus raíces.
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| ¡Debemos tener implacable voluntad de cambio! |
¡Nuestra mente debe trabajar en equipo!
No es cuestión de que reprimas tus pensamientos y te digas “no debo pensar esto”; es cuestión de que dejes fluir tu mente para que ningún pensamiento negativo se aferre a ella. Así que si en algún momento te encuentras con un “no puedo”, puedes decirte a ti mism@: “estoy en un proceso de cambio y el miedo es normal, pero sé que voy a lograr lo que me he propuesto”.
Todo parte entonces de nuestra fuerza de voluntad para mejorar, nadie aprende a tocar un instrumento magistralmente en un mes, todo se da en la práctica; de igual manera te digo que si pones practica un incondicional apoyo del consciente al subconsciente, lograrás cambiar lo que anhelas justo como lo has soñado.
Con infinito amor…
© Lluvia
Foto Créditos: Foto 1, Foto 3 y Foto 4