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Los 5 Principales Miedos al Emprender

el 3 mayo 2015

Al emprender,  muchas veces podemos tener nuestra meta u objetivo tan claro que observamos las cosas demasiado “simples”; hablar y generar ideas es relativamente sencillo pero si en el momento de la ejecución existen falencias y nos centramos sólo en algunas tareas, olvidamos todas las estrategias y planes que teníamos en el inicio, lo que hace que posiblemente perdamos nuestro rumbo por miedo.

El miedo es una respuesta natural ante el peligro, situación de cualquier índole (familiar, trabajo, emocional, etc.)  Es una sensación desagradable que atraviesa el cuerpo, la mente y el alma que se puede deber a algo que pasó, que está sucediendo o que podría pasar.  Ésta es la principal causa de por qué demasiados emprendedores tiran la toalla sin haber dado la pelea.

Emprendices tiene el top 5 de los miedos más comunes entre emprendedores, te dejamos una recomendación en cada uno para que puedas superar las dificultades y tu proyecto no se hunda en el fracaso.

Miedos al emprender

  1. Sin Autoestima

Es que “creerse el cuento” es fundamental, sea cual sea tu proyecto, por muy pequeña empresa; todo recae en la actitud con que asumas las responsabilidades y proyectes ésta energía a los demás (inversionistas, clientes).

Olvida la frase “No puedo”, utiliza “lo intentaré una vez más” y concreta metas pequeñas para que su alcance sea cercano y así puedas aumentar la confianza contigo; importante establecer una fecha límite.

  1. No poseo una idea revolucionaria

Recuerda que las cosas no son perfectas, todo es relativo y cada vez puede ir mejorando en el camino. No es el hecho que todos los emprendedores sean “genios” por algún invento como Sócrates, Einstein ó Newton; todo lo contrario el emprendedor es un agente de cambio que comparte con otros sus ideas para innovar y mejorar a diario; si éste no lo hace el mercado y la demanda por dinámica del mismo lo harán. Todo empieza por algo, recuerda los inicios de Apple, Microsoft, Nintendo por sólo citar unos ejemplos; no busques ideas perfectas, mejor revoluciona las pequeñas ideas.

  1. Aún No termino el producto

Casi siempre, solemos pensar que necesitamos tener el producto terminado para que los inversionistas y compradores vengan a nosotros y nos volvamos “millonarios” de la noche a la mañana. Y para nada es así, puedes validar el producto mediante una pre-venta y empezar a distinguir mejor tu segmento de clientes de ésta manera enfocar el producto en primer lugar a un segmento específico. Evitando gasto de energía, tiempo y recursos creando “algo” que por más productivo que sea para ti, las otras personas no lo encuentran atractivo y no podrás si quiera recuperar el capital invertido.

  1. Sin dinero

La mayor “excusa” para desertar en el emprendimiento es la falta de recursos, principalmente dinero e inversionistas. Estás olvidando que un emprendedor, gestiona y no se da por vencido ante las dificultades y la mejor manera de hacerlo, es aplicando networking sumado a la creatividad, con habilidades comunicativas para abrirte espacio con nuevas relaciones que te puedan apoyar.

  1. Inexperiencia

Sin lugar a duda, el temor aumenta cuando es el “primer lanzamiento” al mundo emprendedor y sentir que la inexperiencia te resta puntos; pero no es así actualmente no hay límite para aprender, internet ha revolucionado el mundo y es un modelo de autoaprendizaje de alcance fácil y económico; también te puedes apoyar en un mentor ó algún conocido que haya tenido un caso empresarial exitoso, lo realmente importante es la actitud con que asumas los retos.

Te invitamos a que nos compartas tu experiencia e invites a otros emprendedores a que dejen sus temores de lado y se lancen a emprender, pues más que un reto es una pasión. No olvides que “Un emprendedor ve oportunidades donde otros sólo ven problemas”. Michael Gerbe

Joven comprometida con la sociedad y el medio ambiente, trabajadora social en formación, fiel creyente que no podré transformar el mundo pero sí modificar una pequeña parte de la realidad, es la huella en el mundo la que nos diferencia, esencia.

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