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Conceptos económico financiero: los activos y el pasivo

Nos vamos acercando peligrosamente al temido “plan financiero” de nuestro business plan. Mientras continuamos estudiando el mercado es conveniente ir conociendo algunos términos relacionados con el funcionamiento económico y financiero de nuestra futura empresa. Esta nueva sección no tiene el fin de convertirnos es unos economistas, ni siquiera se trata de hacer un curso de contabilidad y finanzas. Creo que lo más acertado es que llegado el momento, deleguemos esas funciones en personal preparado para ello (una asesoría, por ejemplo). Sin embargo, es fundamental conocer y entender la economía financiera de una empresa para poder tomar decisiones correctas.

He decidido empezar por el activo y el pasivo porque son unos términos que nos encontraremos muy a menudo. Básicamente, son términos contables que se emplean para conocer el patrimonio real de la empresa a través de los balances.

LOS ACTIVOS.

Un activo es cualquier bien o derecho de propiedad que tiene una empresa y que nos proporcionará rentas en un futuro. El local u oficinas donde se desarrolla la actividad de la empresa, el vehículo que se emplea para repartir o vender nuestro producto, o incluso la confianza que tienen en nosotros los clientes y la imagen corporativa, son activos de nuestra empresa. Por esto, es importante entender que un activo puede ser, tanto material (activo físico), como intangible.

El conjunto de los activos queda compuesto por los activos no corrientes, que son aquellas inversiones permanentes o, a largo plazo (más de un ejercicio) y por los activos corrientes, que al contrario, son inversiones a corto plazo. De estos últimos, es importante saber que se emplea el término activo circulante para referirse a aquellos elementos que se utilizan para el funcionamiento del día a día de nuestra actividad: luz, agua, nóminas, etc. Atentos siempre a este concepto, que está estrechamente relacionado con nuestra tesorería como iremos viendo.

PASIVO.

Si decíamos que los activos eran los bienes o derechos de una empresa, en el pasivo nos encontramos con todas las obligaciones y deudas que la empresa tiene con terceros. Aquí agrupamos las deudas contraídas con proveedores, subcontratas y entidades financieras (en general, los acreedores). Si dichas obligaciones se liquidan en un periodo inferior al año, estaríamos hablando del pasivo corriente, mientras que si son liquidadas en un plazo superior a un año, pertenecerían al pasivo no corriente.

EL PATRIMONIO DE UNA EMPRESA.

El patrimonio no es más ni menos que la diferencia entre los activos de nuestra empresa y el pasivo.

ACTIVO – PASIVO = PATRIMONIO

Aunque en realidad, el patrimonio es técnicamente parte del pasivo (o más bien, un tipo de pasivo). Esto significa que la empresa tiene una serie de obligaciones con los socios y accionistas. Lo que ocurre es que, a diferencia del pasivo, no son exigibles.

La ecuación siempre debe estar igualada, de lo contrario, algún error contable habremos cometido. Si los activos se incrementan, nuestro patrimonio también lo hará. Si contraemos más deuda, el pasivo aumentará y por consiguiente, nuestro patrimonio se resentirá. Quizás este gráfico os resulte más aclaratorio:

Lógicamente, los activos de una empresa han de ser mayores que el pasivo. De lo contrario estaríamos hablando de quiebras y otros términos muy desagradables que ningún emprendedor desea leer. Sin embargo, un buen patrimonio no indica que nuestra empresa esté funcionando. Empresas como en la que estoy trabajando tienen en activos 20 veces el valor que en el pasivo. Estamos hablando de un patrimonio de miles de millones de euros, sin embargo, está al borde del cierre. ¿Cómo es posible? Muy sencillo, si no has entendido nada hasta ahora, no te preocupes porque con este caso lo entenderás a la perfección:

Mi empresa, como la mayoría de empresas constructoras de España, ha construido durante los últimos años muchas viviendas, las cuales, debido a la crisis, son imposibles de vender. Esto significa que tienen MUCHOS ACTIVOS, activos que en un futuro (cuando pase la crisis) se venderán, se convertirán en dinero y podrán hacer frente a sus deudas (sí, el pasivo). Sin embargo, a día de hoy, esta empresa tiene un problema serio de tesorería, ya que no tiene liquidez para hacer frente a las deudas contraídas con sus acreedores. Por ahora el balance es favorable, ya que mientras los activos sean superiores al pasivo, siempre queda algo de esperanza. El problema al que se enfrenta es que el pasivo crece a ritmo alarmante, y cuando éste supere al activo, yo sé de uno que pasará a incrementar el número de parados (por lo menos hasta que consiga crear mi proyecto!)

Bueno, creo que profundizando hasta aquí es suficiente para un emprendedor. Entiendo que esto haya gustado poco, pero no todo son ideas y marketing, también hay mucha burocracia y economía que más vale conocer por el bien de vuestro proyecto.

Por último, tengo que agradecer a mis amigos y lectores el apoyo que me han prestado para llevar a cabo esta sección.

VÍA | Emprendeblog.es

FUENTE | Introducción a la Administración de Empresas (Bliblioteca Civitas Economía y Empresa), con la colaboración de Alex, Carmen e Inma.

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