Una empresa exitosa tarde o temprano se tendrá que expandir, y será crucial revisar desde los recursos disponibles para hacerlo hasta la planeación de una estrategia de negocios afín a los objetivos y sentido que se le dé a la expansión para llevarla a cabo correctamente.
Esto porque la expansión de una empresa puede darse con distintos sentidos, y cada uno demanda una estrategia diferente. A continuación veremos algunos de ellos, así como una estrategia de negocios relacionada a cada uno.
¿En qué sentido quieres expandir tu empresa? ¡Elige la estrategia de negocios correcta al hacerlo!
Con más sucursales
Este es el sentido más común, ya que desde pequeñas y medianas empresas (PyMes), hasta grandes corporaciones suelen contar con la posibilidad de hacerlo. Con esta expansión se busca tener una mayor presencia a través de nuevas sucursales, y para hacerlo correctamente será necesario revisar a detalle distintos factores como: la demanda potencial en la nueva locación, los costos involucrados, la contratación de personal, entre otros.
Una buena opción para la estrategia de negocios en este caso será realizarla con un enfoque de costos, donde se busque replicar el modelo de éxito de la sucursal principal eficientando al máximo el uso de recursos. Aunque esto sólo será parte de una planeación integral, que deberá centrarse en una investigación de mercados a profundidad, a fin de generar proyecciones y afianzar la viabilidad de la nueva sucursal.
Atacando una necesidad desatendida
Esto puede ir desde el enfoque de presentar nuevos usos a los productos existentes o a la creación de nuevas líneas de producto. Lo principal será detectar un vacío real, donde los consumidores soliciten algo que tú negocio sea capaz de proporcionar y que actualmente no les sea cubierto como debería. Este sentido de expansión suele darse mucho con empresas tecnológicas y de software, ya que la creación de nuevas aplicaciones para móviles y equipo de computo para cubrir nuevas necesidades se ha vuelto una constante.
Desde necesidades personales como ahorrar y ejercitarse, o de negocio, como la administración de recursos o el control de obra, la industria tecnológica es el mejor ejemplo de este tipo de expansión. La estrategia de negocio que suele utilizarse en estos casos busca generar una demanda estable antes de medirse con los competidores, ya que en un mercado “nuevo” o que apenas se está explotando no importa quien domine, nadie está ganando.
Adentrándose en nuevos mercados
El primer paso para considerar este tipo de expansión será contar con una presencia afianzada a nivel local, distintas sucursales con ventas estables y un análisis a detalle que compruebe la existencia de demanda del producto o servicio que se ofrece en otros lugares, así como la capacidad de cubrirla sin descuidar la demanda actual.
En este caso, la estrategia de negocios a seguir podría enfocarse en la flexibilidad, buscando evitar fijar los costes fijos. Esto debido a que la empresa al ingresar a un mercado nuevo deberá ser capaz de experimentar, y fijar costos para potenciar la oferta puede no ser la mejor manera de hacerlo. Sin importar el producto o servicio que se ofrezca, será importante tener la capacidad de cambiar de enfoque si las cosas no salen como se tenían planeadas, o si el mercado ofrece nuevas y mejores oportunidades de negocios.
Junto con estas estrategias también será necesario aprender a entender cuando es el mejor momento para expandirse y poder planear, ajustar tiempos de manera detenida y generar mayores probabilidades de éxito.
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