X

¿Te da miedo hacer un cambio profesional por motivos económicos?

¿Has estado pensando en cambiar de trabajo o incluso has querido iniciar un negocio propio pero te da miedo no encontrar nada, que las cosas no funcionen como esperas y quedarte en una especie de «limbo económico»?

Ese es uno de los grandes miedos cuando tienes que hacer un cambio y, como mencionaba hace tiempo en otro artículo, la sensación es similar a la de lanzarte al vacío, ¿Verdad? Aunque a mi me gusta más la comparación con el trapecista que suelta un trapecio para agarrarse a otro y ese momento en el que está en el aire sin apoyo alguno…

La cuestión es que es normal que esa sensación te produzca intranquilidad o miedo. Siempre digo que no somos máquinas que vayamos por ahí sin sentir ni padecer. Así que pretender hacer un cambio de ese tipo sin preocuparse es poco realista. Obviamente la situación mejora cuando ya tienes algo más o menos seguro, pero aun así tendrías algún tipo de miedo: a fracasar, a arrepentirte, a no estar a la altura, etc.

Acuérdate, el miedo no desaparece, se sustituye por otro y lo mejor es seguir adelante a pesar de ese miedo, no esperar a que desaparezca.

De todas formas, esto es lo que puedes hacer para atreverte y que te cueste menos:

1. Ten una red de seguridad

Si puedes antes de hacer el cambio, de dar el salto, ahorra para que puedas estar un tiempo sin cobrar y sin estresarte por ello. La verdad es que es muy diferente empezar algo nuevo sin estrés porque se te acaba el dinero. Con estrés no piensas con claridad. Por eso a veces merece la pena esperar un poco más mientras te haces con un colchón económico.

Otra opción es pedir un crédito o un préstamo a un familiar. Yo personalmente prefiero evitarlo y partir de lo que yo tengo y puedo, te recomiendo no endeudarte porque entonces volvemos a las mismas; pero es decisión tuya.

2. Descubre tu gran porqué.

¿Recuerdas que lo he mencionado muchas veces? Cuando tienes claro por qué quieres hacer algo, eso se convierte en tu motor en los momentos bajos. Y con «tu por qué» me refiero a una razón verdaderamente fuerte, sea la que sea, una razón que te diga: esto lo voy a conseguir sí o sí por…

Y que cuando la digas te enciendas. Nada de porque estoy aburrida, porque quiero más dinero, algo que te de fuerza y eso solo lo puedes decir tú, puede ser una razón altruista o egoísta, da igual, lo importante es que te de fuerzas. Que cada vez que la digas tu vocecita interna te diga «¡eso es!» Como por ejemplo:

– Porque yo he nacido para esto y me lo merezco.

– Porque quiero callarles la boca a todos y demostrarme que puedo.

– Porque quiero cambiarle la vida a otras mujeres.

– Porque quiero vivir rodeada de lujos.

– …

Y no voy a parar hasta conseguirlo.

Lo que te inspire a ti, no hay nada incorrecto.

3. Rodéate de gente que te entienda y apoye.

Esto supone una diferencia enorme, lo bien que te sientes entre personas que están pasando por lo mismo que tú. Te sientes «normal» y apoyada. No hay críticas ni desánimo, sino apoyo e ideas, y eso hace que estés más motivada, que sientas que tienes una red segura si te caes y que te lances a por más. No falla.

Y si nada de esto te funciona entonces plantéate bien ese cambio. ¿De verdad es lo que necesitas? Quizá mejorando parte de la situación se produzca el cambio que buscas. A veces cambiar tu actitud o mejorar otro área de tu vida tiene el efecto que quieres. Sobre todo en lo relativo a dejar un trabajo con un sueldo estable y empezar tu negocio tienes que tener claro que no es para todo el mundo, por una sencilla razón: tener tu propio negocio implica saber convivir bien con la incertidumbre económica y hay personas para las que eso supondría un estrés y angustia constantes.

¿Cómo puedes saberlo? En mi experiencia si la incertidumbre te da un poco de miedo y mucha emoción vas por buen camino. Sin embargo si solo te produce angustia y la idea de no contar con un sueldo fijo te aterra, piénsatelo bien. Tener tu propio negocio implica, sí o sí, saber convivir y disfrutar con la incertidumbre.

Aquí no hay respuesta correcta o incorrecta, lo que mejor te haga sentir es lo que vale.

¿Qué vas a hacer al respecto? Cuéntamelo en los comentarios más abajo.

Artículos Relacionados