En la actualidad, muchas personas sueñan con la idea de independizarse, formar su pequeña empresa, ser su propio jefe, dar empleo y generar “grandes” ganancias. La mayoría de las personas persiguen “su idea de negocio”, esa que a veces les quita el sueño, pero que, en la práctica, no es posible realizar. Hablamos, por ejemplo, de esos emprendedores que siempre han soñado con tener una heladería, pero viven en una ciudad donde el clima y la gastronomía típica no lo permiten, pero su idea y sus ganas de querer emprender en ese negocio son tantas que se ciegan y realizan la inversión, idealizando un emprendimiento sin analizarlo y viendo ganancias donde no las hay y por ende fracasan. Sin ir más allá, tenemos el ejemplo de la cadena McDonald’s, que no tuvo el auge que esperaba cuando abrió su restaurante en la India, considerando la población del país, pensaron que sería un negocio muy rentable, pero no se dieron el trabajo de analizar las costumbres, ya que en la india la carne de vaca es sagrada, por lo que las Big Mac no tenían ventas. Razón por la cual tuvieron que modificar sus menús e incluso volverlos vegetarianos.
Existen otros emprendedores, en cambio, que desean iniciar un negocio, pero no saben en qué área. Son esos emprendedores que realizan una búsqueda por Internet, «Mejores emprendimientos del año», «En qué emprender este 2022» y, de acuerdo a esos ranking, seleccionan una idea, la que a ellos les parece más viable, más no una idea que los motiva, pero como los buscadores dicen que ese emprendimiento es el que está en la cima, las personas continúan con su plan, sin saber si en el país donde ellos viven esa idea está posicionada como describe el artículo. Sumar a eso, que las fuentes en la web a veces son poco confiables.
Por otra parte, algunas ideas de negocio se crean a partir de la necesidad de satisfacer ciertas carencias, por ejemplo, en un sector donde se habilitan casas o departamentos nuevos y no existe un negocio cercano donde poder abastecerse de víveres, entra ahí el rol de algún emprendedor visionario que ve que existe una necesidad, y él mediante la apertura de un almacén genera una solución.
A mi parecer, no importa si se tiene una idea fija o buscada en las estadísticas de cuáles son los mejores emprendimientos del año en curso, lo esencial antes de poner en marcha la idea de negocio, hay que convertirla en un proyecto real en papel, y se debe realizar una serie de pasos que muchos emprendedores pasan por alto y es por eso que más del 75% de las empresas fracasan antes del tercer año de apertura. y la pregunta es, ¿Por qué ocurre esto?
Y la respuesta quizás es que muchos de los emprendedores no estudian para emprender, y tampoco se asesoran correctamente, pero tienen el capital y las ganas de hacerlo, entonces emprenden. Pero se les olvida que para emprender hay que crear un proyecto, que va más allá de llenar los documentos legales que te permiten realizar la apertura de tu negocio, y es que muchos que emprenden por primera vez piensan “compro a 10, vendo a 15 y ya gané 5”, pero no consideran otros factores y en vez de ganar 5 se gana 2, y al segundo año eso se vuelve 1, hasta que ya no hay ganancias.
Por eso es necesario que al momento de emprender se cuente con alguien que asesore, para que el capital inicial pueda ser recuperado y se pueda comenzar a generar ganancias y que el emprendimiento perdure en el tiempo. Lo principal, sin duda, es realizar un estudio de mercado y analizar la propuesta de negocio, e ir jugando a las probabilidades, tanto pesimistas, como favorables, y analizar todos los posibles escenarios.
Al hablar de estudio de mercado nos referimos al análisis de diferentes factores cuyo fin es determinar la viabilidad comercial y económica de una idea de negocio. Para ello se realiza un análisis del entorno, donde se comienza con el macroentorno, para eso se puede utilizar el análisis PESTEL, que hace referencia a los factores que se analizan: Políticos, Económicos, Sociales, Tecnológicos, Ecológicos y Legales de tu idea de negocio. Para analizar el microentorno hay diferentes herramientas: las 5 fuerzas de Porter, cadena de valor, análisis FODA, además debes determinar cuál va a ser tu estrategia y tu ventaja competitiva, visión y misión. Luego deberás analizar los submercados, y determinar quiénes serán tus proveedores, competidores, distribuidores y consumidores.
Una vez realizado lo anterior podrás realizar el cálculo de la demanda, para luego continuar con la elaboración de tu estrategia comercial, en donde detallaras el producto o servicio, como realizaras la promoción de este, cuál será su plaza y fijaras su precio. Dependiendo de tu emprendimiento deberás realizar un estudio técnico para ver si debes realizar un proceso productivo, establecer la localización y el tamaño necesario de donde instalar tu emprendimiento, incluso podrías necesitar hacer un estudio legal, institucional o sanitario, y junto con ello elaborar la estructura de costos, gastos e inversiones del proyecto, para luego poder construir un horizonte de evaluación que considere, ganancias, gastos costos, inversiones, pagos, impuestos y gastos de puesta en marcha, para que según el flujo se pueda observar la viabilidad del proyecto.
Hay quienes piensan que lo anterior está de más y que es mucho trabajo realizar un estudio de viabilidad, que con motivación y esfuerzo, todo es posible, y algunos emprendedores lo logran sin realizar un estudio previo, pero es un porcentaje menor, pero de lo anterior puede depender que tu sueño de emprender se vuelva realidad o fracase, y por sobre todo que perdure en el tiempo y obviamente un buen estudio de viabilidad, junto a un emprendedor motivado y esforzado es lo ideal para emprender y que tu sueño deje de ser un sueño y se vuelva una realidad.
Acerca de la autora: Este artículo fue escrito por Valeska Petermann Rocha, Asistente Ejecutiva y de Gestión, Manpower; Ingeniera de Ejecución en Administración de Empresas, Universidad Católica de la Santísima Concepción. Chile.