En la actualidad, las empresas deben poner mucha atención a factores internos que afectan a la productividad de sus colaboradores, como el clima laboral, ya que estos conllevan un daño a la competitividad en el mercado actual. Cuando se identifica un estancamiento en la productividad y el alcance de los objetivos es indispensable analizar factores como la motivación, el clima laboral, errores de comunicación, entre otros con el fin de que los líderes puedan fortalecer sus habilidades y orientar al equipo de mejor manera.
El clima laboral se define como el entorno en el que se desempeñan los trabajadores de una empresa, desde el mobiliario, las características del inmueble, hasta el trato de los directivos, herramientas de colaboración, carga de trabajo y estilo de liderazgo, por lo que un mal clima se relaciona directamente con la baja en productividad y carencia de compromiso de los colaboradores.
Por su parte, un buen clima laboral se orienta hacia los objetivos de la empresa, potenciando factores como:
- Autonomía. El grado de independencia con el que los colaboradores ejecutan sus tareas habituales se relaciona con el clima laboral, por lo que se recomienda permitir que tengan tanta flexibilidad como sea posible para administrar su tiempo.
- Condiciones físicas. Es importante que los líderes tomen en cuenta la iluminación, el sonido, la distribución de los espacios, el mobiliario, el buen estado de las herramientas de trabajo, entre otros elementos que se relacionan con el bienestar de las personas, pero que también influyen en su productividad.
- Remuneración. Un buen salario no es lo único que influye en el clima laboral, también las prestaciones y programas de recompensa por un buen desempeño: bonos de productividad, caja de ahorro, vales de despensa, entre otros que los líderes deben considerar para mejorar la motivación y crear un clima más agradable.
- Igualdad. En definitiva, pocas actitudes dañan tanto a los colaboradores como el nepotismo, favorecer a empleados por su parentesco o relación con los directivos, la discriminación por color de piel, género u otros aspectos no relacionados con la productividad. La igualdad es un valor que determina que los miembros del personal deben ser tratados con base en criterios definidos.
- Trato. El liderazgo se caracteriza por brindar un trato cercano a los miembros del equipo, comunicándose con ellos de forma asertiva y empática ante sus situaciones personales, lo cual tiene consecuencias positivas para el clima laboral.
Si en tu negocio se maneja un estilo de liderazgo considerando los factores mencionados, así como otros más, tendrás un equipo de alto rendimiento, que conduzca al éxito y alcance de los objetivos. De lo contrario, te invitamos a hacer una reflexión sobre los errores que se han cometido y la forma de solucionarlos para evitar problemas a mediano plazo.